La pimienta blanca entera tiene un sabor más suave y más delicado que el de la pimienta negra. Este tipo de pimienta es útil cuando quieres agregar un ligero sabor picante a las salsas y a las sopas sin teñir el plato de color negro. La pimienta blanca es más cara que la pimienta negra, ya que contiene más piperina, un aceite volátil que le da su característico sabor de pimienta.
Es una excelente fuente de manganeso y una muy buena fuente de hierro. También es una buena fuente de fibra dietética.